Para tus primeros pasos en el nuevo mundo académico; es necesario, recuperar el hábito de estudio, así como potenciar la capacidad de razonamiento y comprensión lectora para llevar con éxito la nueva vida universitaria.
Elegir una técnica de estudio es una de las primeras pautas. Para algunas personas es efectivo repetir los temas de estudio de forma oral o escrita. En adultos la más efectiva es leer el texto y redactar el contenido con reflexiones personales sobre ello. Esto permite entender la lógica de los nuevos conceptos que estudiamos y plasmarlos en un texto para su posterior repaso. La coherencia de estos textos y la relación causa efecto son conocimientos que se asimilan con más facilidad y difícilmente se olvidan.
Empezar con períodos cortos de estudio, también es una buena técnica, es decir, que para habituarnos de nuevo es bueno empezar con períodos de entre 20 y 30 minutos e ir alargándolos; será útil marcarnos un obejtivo. Es recomendable que aproximadamente cada cierto tiempo hacer una pausa, levantarnos, caminar, tomar un vaso de agua o acercarnos a una ventana y que nos dé el aire nos irá bien para despejar la mente y continuar.
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